Es evidente hoy que una de las principales
características de las sociedades modernas tiene que ver con la complejización
en la mayoría de los sectores de la vida cotidiana de las personas, cuestión
que se acentúa y se hace todavía más notoria al momento de analizar espacios
académicos y laborales. En este sentido, el fenómeno de globalizador que hoy
rige al mundo se ha encargado de elevar los índices en cuanto a competencia en
materia de mercados y del quehacer diario de la mayor parte de la población,
obligando a esta última a actuar en consecuencia. Una de las respuestas que las
comunidades de nuestros días han tenido ha sido la de apostar por la
capacitación, generando permanentemente nuevas instancias académicas de todos
los niveles y asociadas a todos los campos del conocimiento que resultan
fundamentales en la actualidad. Un caso testigo es el de los programas superiores de control de gestión, propuestas de alcance internacional pero de
fácil acceso que permiten a los interesados convertirse en profesionales de la
regulación de las administraciones.
En relación a la importancia que hoy alcanza la educación
en cuanto a la optimización de las gestiones, es claro que solo aquellos que
apuestan por una administración profesional, óptima y transparente son los que
alcanzan el éxito en sus respectivas labores. Caso contrario, se está siempre
propenso a sufrir situaciones desagradables, como consecuencia del bajo rendimiento
o, lo que es peor, de la falta de identidad de las personas involucradas. Un
ejemplo claro de esta realidad es el que indica que los rescoldos de la
polémica suscitada en el último Consejo General que aprobó inicialmente el
presupuesto del Consorcio de Aguas de Busturialdea siguen sin apagarse. Ayer,
fue el PNV el que levantó la voz para censurar el "oscurantismo" con
el que, a su juicio, Bildu gestiona la entidad comarcal. Los jeltzales
lamentaron que en febrero se maquillaran unas cuentas estipuladas en 6,1
millones de euros pero cuyo reformado sistema de gestión, inciden, tendrá
"efectos negativos" en la ciudadanía. Auguran que, además de unmodelo "sin garantías de calidad", será "mucho más caro".
"Han hurtado información necesaria para conocer el grado de encarecimiento
de un sistema, vanagloriándose de que no van a subir las tarifas",
apuntaron desde la formación jeltzale acerca del nuevo modelo -internalizar
varias prestaciones del ente- que la coalición prevé implantar. Es más,
estimaron que la dirección da luz verde a unos presupuestos "sin que sean
debatidos democráticamente. Y, por último, en vez de contestarnos con datos y
rebatir con argumentos acuden a su demagogia y a la calumnia". En momentos
como este es donde uno se pregunta por qué las autoridades no ejercieron el
debido control de esta clase de gestiones, con los beneficios que eso genera
para la comunidad en su conjunto.
Precisamente para poder acceder a esa labor de excelencia
en cuanto a la regulación de las administraciones, sin importar si son del
orden público o del privado, es que existen hoy los cursos y programas
superiores de control de gestión, donde se capacita a los alumnos al más alto
nivel, procurando que estos consigan las últimas herramientas y estrategias
conocidas para normalizar cualquier administración que no resulte óptima o
transparente.